martes, 6 de octubre de 2015

Akuma is back || New boyfriend, new everything.♡

Holaaaa.♡
Ha pasado ya demasiado tiempo desde la última vez que vine por aquí, ¿cierto? Al final no pude venir a actualizar seguido como a mí me hubiera gustado. Ya sea por tarea o por algún otro compromiso, o simplemente porque deseaba dormir temprano mejor haha. El punto es que por equis o ye no había podido venir a escribir algo, pero hoy he decidido hacerlo.

A decir verdad tengo muchas cosas que deseo contar, y de igual forma espero no explayarme tanto porque luego puede resultar algo tediosa la lectura, ¿no? Pero bueno. Han pasado muchas cosas desde la última vez. Unas buenas y otras malas, aunque me impresiona decir que son muchísimas más las cosas buenas en comparación con las malas. Esto es como que algo nuevo para mí.

¿Por dónde debería iniciar? Ah...


Para empezar, como ya es algo habitual en mí, no pude mantener mucho tiempo la dieta de la última entrada (yup, I'm sucks) si acaso logré mantenerla como por 5 días antes de terminar por dejarla. No, esta vez no me di atracones después, simplemente comencé a comer "normal". Eso sí, me di mis lujos de vez en cuando pero nunca llegaba a los excesos. A pesar de ello, yo estaba consciente de que no estaba haciendo dieta.

Me sentía abrumada pero no como antes, y eso era algo que me molestaba de cierta forma. Es que era muy extraño, ¿saben?

No sé en qué momento fue que la tristeza y la depresión se alejaron de mi dejando libre el paso para la felicidad.

Es que en sí eso fue algo tan confuso para mí. Si alguna vez han leído algunas de mis entradas anteriores se darán cuenta que yo soy/era una persona muy depresiva... Sí, tenía mis momentos cortos de felicidad pero luego terminaba por derrumbarme y sentirme cada vez más pésimo. Cada vez iba cayendo más y más en mi pozo de depresión, pero de repente todo era distinto.

Comencé a sonreír con más normalidad, disfrutaba de las cosas, sentía una alegría inmensa. Puede ser que no todos los días haya irradiado felicidad o destellos de luz por todos lados (si me entienden) pero aun así dejé de sentirme triste. Aun cuando cometía errores, aun cuando la imagen de mí en el espejo no me gustara, aun cuando sucedieran cosas malas en mi día, siempre terminaba por sonreír y reír como si nada hubiera pasado.

Recuerdo que incluso le preguntaba a una amiga "¿Qué demonios me pasó?" haha. Es que es inexplicable cómo de la noche a la mañana todo parecía ser distinto, veía las cosas de una forma diferente. Fue como toda una nueva aventura: Aprendiendo a ser feliz.


Realmente no recuerdo cuándo fue que inicié a ver las cosas de esa manera, pero a pesar de que fue un aspecto bastante positivo en mi vida, lo sentí negativo en otro. Dietas.

Siendo sincera, tardé un periodo de tiempo sin hacer nada de dieta. Comía digamos que normal. Tortilla, refrescos, yogurth, flautas de vez en cuando, frituras ocasionales, en fin. Comía bien, algunas veces hasta llenar, otras veces solo a quedar satisfecha pero no hacía nada por volver a mi dieta. Entonces un día decidí que ya era suficiente, no podía quedarme estancada en cierto peso (después terminaría por subir más en algún momento) y decidí iniciar una nueva dieta. Y bueno, ahí fue cuando el terror y el descontento comenzó.


No importaba cuántas veces comenzara, no importaba qué tantas cosas me prohibiera o qué tantas metas me propusiera lograr, siempre terminaba por fallar. ¿Y saben qué es lo peor? Que no me sentía mal por ello, ni tampoco sentía culpa ni nada. Sí, siempre me miraba al espejo y me daba asco...pero solo eran escasos segundos los que duraba esa sensación, después simplemente volvía a comer como si nada. O bien, iniciaba el día con esa idea y respetaba la dieta hasta la comida, y después por la tarde ya estaba comiendo de nuevo...


Entonces una nueva alternativa se presentó ante mí.


Por curiosidad entre esos días vine a checar mi blog y me encontré con varios comentarios, entre ellos el comentario de un chico (Aldo) que la verdad fue como si me arrojaran un balde de agua fría encima. Me caló leer lo que dijo, pero la verdad es que no era otra cosa más que la verdad y de hecho tenía mucha razón. (Por cierto, te agradezco bastante el hecho de que me hayas escrito eso ♡) Fue entonces cuando la idea de hacer una dieta que fuera más sana llegó a mi mente, es decir, ¿por qué no? Antes cuando era más chica había optado por realizar una dieta bastante sana con ejercicio y la verdad había bajado bastante. Ahora sí que lento pero seguro. Y pues bueno, eso fue lo que decidí poner en marcha.

Y tal como si pareciera cosa del destino haha, mi mamá me apoyó con la dieta pero siempre y cuando comiera a mis horas y eso. Por las mañanas, usualmente me levantaba tarde a propósito para que al momento de la comida ya no alcanzara a comer nada y entonces iniciara bien mi dieta del día. Ahora, mi mamá me hacía de comer y me llevaba la comida hacia mi cuarto o donde me peinaba para así mientras me arreglaba pudiera comer bien y eso.

No es una dieta a la que estuviera acostumbrada. Normalmente el hecho de comer y no dejar de comer no me suena tanto como a una dieta, pero por alguna extraña razón parecía funcionarme.

Una dieta rica en frutas y verduras sin privarme casi nada salvo las harinas y las frituras. Eso sí, el ejercicio trataba de hacerlo casi a diario, aunque con eso de las tareas y desvelos a veces no me quedaba tiempo para hacerlo. ¿El punto bueno a mi favor? Martes y jueves realizo ejercicio sin falta por jazz, y pues el fin de semana también puedo hacerlo sin problema.


Desde entonces me he mantenido con esta dieta la cual me cayó de maravilla. Como no me restringe mucho, puedo comer bien, puedo sentirme satisfecha sin llegar a los excesos y por lo mismo no me dan ganas de darme atracones. En los casos en los que me da hambre entre comidas, no hay nada que la fruta no pueda solucionar.♡



[ || Continuará || ]
[ || Si alguien lee esto en el día, continuaré esta entrada en la tarde, ahora tengo sueño haha pero deseaba publicarla de una vez. Buen día ♡|| ]
[Akuma]